Hoy en día, nuestro tipo de vida nos obliga a pasar mucho tiempo en interiores, y la mayoría pensamos que, abrir las ventanas es suficiente para respirar aire fresco, pero no somos conscientes de que estamos rodeados de polución y otros contaminantes, sobre todo si vivimos en grandes ciudades.

El aire, está plagado de partículas contaminantes, especialmente en el interior, como el polvo,  polen, humo del tabaco o vapores de cocina que afectan a la calidad del aire de forma visible.

Y ahora, más que nunca sabemos, que hay otros contaminantes que no podemos percibir, como los virus, las bacterias o incluso esporas de moho. Se propagan por todo tu hogar sin que puedas darte cuenta, de la misma manera que lo hacen los malos olores, gases u otras partículas contaminantes.

Nada es más importante que respirar aire limpio y ahora, puedes tener el control, asegurando que tú y tu familia respiráis aire puro, limpio y libre de bacterias.